viernes, 23 de septiembre de 2011

Dios sol.


Eres como un día soleado. Alegras el día a cualquiera. Aunque haya habido tormentas de semanas, meses. Se podría decir que eres ese sol que sale en invierno. Ese que te da calor y te hace quitarte la ropa como solo él sabe hacerlo. El que te pide beber porque te deja seca por sus tremendos besos. Ese que inesperadamente hace que sientas la necesidad de salir de fiesta. Aquel que te hace sudar para que recuerdes que sois tremendos en la cama. Eres ese sol, que siempre esta aunque no lo veas, el que sabes que a la mañana siguiente estará ahí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario